viernes, 28 de enero de 2011

Bilingüe por orden judicial

Artículo de Manu Planelles en El País Andalucía de hoy.


"Es la lucha de David contra Goliat", resume el abogado Antonio Ruiz Rosales. David sería en este caso la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) Los Dólmenes, del colegio público Monteolivo de Castilleja de Guzmán (Sevilla). Goliat es la Consejería de Educación, a la que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha obligado a que inscriba en el programa de bilingüismo a este colegio.

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      Más de cinco años llevan guerreando los miembros de esta AMPA, de la que también forma parte Ruiz. Cuando nació en 2005 el colegio, la Consejería de Educación lo dejó fuera del programa de bilingüismo. "Teníamos derecho por ser un centro de nueva creación", señala Manuel Mármol, presidente de la asociación de padres. Sin embargo, Educación entendía que no, que tanto la plantilla docente como los alumnos provenían de otro colegio existente en la localidad, por lo que no eran un centro nuevo y no podían estar inscritos de forma automática en el plan de fomento de los idiomas.

      Tras varios años reclamando por la vía administrativa, los padres decidieron acudir al TSJA. La Junta, que seguía negándoles la posibilidad de entrar en el programa de bilingüismo, llegó incluso a cuestionar que una AMPA estuviera legitimada para poder reclamar. La consejería esgrimió que la demanda de la asociación de padres invadía "las funciones legalmente atribuidas en exclusiva al consejo escolar del centro".

      Sin embargo, el TSJA rechazó este argumento. Y siguió adelante con el proceso. Finalmente, en septiembre de 2009, el alto tribunal dio la razón a los padres y obligó a la consejería a rectificar. La sentencia se hizo firme a finales de 2010 y ayer se publicó en el BOJA la rectificación de la orden de la Consejería de Educación que dejó fuera del programa de bilingüismo a este colegio de Castilleja en 2005.

      "Ahora hemos entrado en el programa por la puerta grande", dice Ruiz. Unos meses antes de que el TSJA diera la razón a los padres, la consejería dio su brazo a torcer y rectificó. El curso pasado el colegio ya estaba inscrito en el plan. Y este curso, tras cinco años de lucha, en las aulas del centro se emplean por primera vez dos idiomas.

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